Bajan las cifras de consumo, pero el vapeo preocupa
Un respiro para la salud juvenil: el consumo de tabaco, alcohol y cannabis en Murcia cae por debajo de la media nacional

En un panorama donde las adicciones entre los jóvenes suelen ser motivo de preocupación, la Región de Murcia emerge como un caso alentador. Según un reciente informe publicado por Cadena SER el 16 de marzo de 2025, el consumo de tabaco, alcohol y cannabis entre los adolescentes murcianos se sitúa por debajo de la media nacional, un dato que refleja los frutos de años de esfuerzos en prevención y educación. Este estudio, basado en la Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias (Estudes) de 2023, revela tendencias positivas que podrían servir de ejemplo para otras comunidades autónomas, aunque también pone de relieve algunos retos pendientes, como el auge del vapeo.
El informe destaca que solo uno de cada cuatro jóvenes murcianos de entre 14 y 18 años ha fumado tabaco en los últimos 12 meses, lo que equivale a una prevalencia del 25,6%, inferior al 27,7% registrado a nivel nacional. Este dato no solo muestra una disminución respecto a la encuesta anterior de 2021 (29,3%), sino que posiciona a Murcia como la segunda comunidad con menor consumo de tabaco en el último año, solo superada por Canarias. Más impresionante aún es que la Región lidera el ranking nacional con la menor prevalencia de consumo de tabaco en los últimos 30 días, un indicativo de que el hábito se está reduciendo de manera sostenida.
En cuanto al alcohol, el 69,8% de los adolescentes murcianos reconoce haber consumido alguna bebida alcohólica en el último año, una cifra que, aunque elevada, está por debajo del promedio nacional del 73,6%. Murcia vuelve a destacar como la segunda comunidad con menor consumo, nuevamente detrás de Canarias, tanto en los últimos 12 meses como en los 30 días previos. Este descenso sugiere que las campañas de sensibilización y los programas educativos están calando entre la juventud, aunque sigue siendo un desafío reducir aún más estas cifras.
El consumo de cannabis, por su parte, también muestra una tendencia favorable. Solo el 17,6% de los jóvenes murcianos lo ha consumido en el último año, frente al 21,8% de la media nacional. Este dato refuerza la idea de que las sustancias tradicionales están perdiendo terreno entre las nuevas generaciones de la Región, un logro que las autoridades sanitarias atribuyen a estrategias preventivas bien estructuradas.
Sin embargo, no todo son buenas noticias. El uso de cigarrillos electrónicos o vapeadores presenta una cara menos alentadora: el 49,8% de los adolescentes murcianos ha vapeado en los últimos 12 meses, un porcentaje que supera en 2,9 puntos la media nacional. Este incremento preocupa a los expertos, que ven en el vapeo una posible puerta de entrada a otras formas de consumo de nicotina y un desafío emergente para las políticas de salud pública.
La Consejería de Salud de Murcia no se queda de brazos cruzados ante estos datos. En colaboración con la Consejería de Educación, se impulsa el Programa ARGOS, una iniciativa centrada en la prevención universal del consumo de alcohol, tabaco, vapeo, cannabis y otras adicciones, incluyendo el juego y el uso problemático de tecnologías. Este programa, reconocido por entidades como la UNESCO y la Comisión Europea, se implementó el pasado curso escolar en 124 centros de secundaria y 30 de primaria, con actividades como las "Unidades Didácticas ALTACAN" y concursos como la "II Edición del Concurso de Vídeos ARGOS: Prevención del Vapeo", en el que participaron 43 aulas de 23 centros educativos.
Además, en el marco del "Plan sobre Adicciones 2021-2026" y el "Plan Nacional de Prevención y Control de Tabaquismo 2024-2027", se está diseñando una campaña específica para adolescentes enfocada en frenar el uso de cigarrillos electrónicos. Con una inversión de 10,5 millones de euros en 2024, el Plan Regional de Adicciones busca consolidar estos avances y abordar las nuevas amenazas que surgen en el horizonte.
Expertos y autoridades coinciden en que la clave del éxito radica en la combinación de educación, regulación y concienciación. "Es prioritario seguir reforzando estas estrategias para erradicar hábitos nocivos y proteger la salud de las futuras generaciones", afirma la Consejería de Salud. Mientras tanto, la Región de Murcia se posiciona como un modelo a seguir, demostrando que el trabajo conjunto entre instituciones, escuelas y familias puede marcar la diferencia en la lucha contra las adicciones juveniles.