«El acuerdo de Atención Primaria no es electoralista; llevamos 9 meses trabajando con los médicos y el Sescam»
En Castilla-La Mancha hay 2.400 médicos de Atención Primaria, 204 centros de salud y más de mil consultorios (solo en Guadalajara, más de 400) distribuidos por toda la geografía regional. El Sindicato Médico (CESM) acaba de firmar un acuerdo con el Sescam para solucionar los problemas que aquejan a este importante ámbito sanitario, el de la atención más cercana al usuario. —¿Por qué han firmado el acuerdo precisamente ahora? ¿Está peor la situación en estos momentos? —El acuerdo se ha firmado ahora porque es ahora cuando hemos llegado a dilucidar cuáles serían las soluciones. Nosotros llevamos trabajando en esto desde el mes de junio de 2022. —¿Y cómo está ahora la situación? —En algunos puntos en concreto está desbordada y, al igual que está pasando en otras Comunidades autónomas del país, esto ya se hablaba entre los médicos, que llamaban al sindicato y pedían soluciones. Llevamos desde junio con reuniones con el Sescam y con los trabajadores y hemos llegado a un acuerdo ahora para ver cómo se puede mejorar la situación laboral en la Atención Primaria. —¿Qué factor es el que influye más negativamente en que la Atención Primaria no funcione de forma óptima? —En Castilla-La Mancha tenemos una gran dispersión geográfica y hay zonas en las que la sobrecarga es similar a la que pueda haber en Madrid, pero hay otras zonas en que no. Si nos vamos a la Primaria de Guadalajara o a la de Cuenca, y la comparamos con determinados centros urbanos de la Comunidad de Madrid, probablemente sea mejor, pero también hay puntos en Castilla-La Mancha que están al mismo nivel que Madrid. —¿Dónde se concentran esos puntos problemáticos? —Cada centro de salud tiene sus características y los problemas son diferentes. Si te vas a un centro de salud que no es urbano también tiene sus problemas, pues a lo mejor un médico tiene que hacerse cargo de tres pueblos. Y sí, hay puntos calientes, zonas urbanas donde el número de pacientes que ve un médico de familia puede ser desproporcionado. —El punto básico del acuerdo con la Junta es la autogestión de los médicos. ¿Qué problemas solucionará? —La autogestión es uno de los puntos más importantes, sin desmerecer al resto. Hay puntos en Atención Primaria donde los profesionales están desbordados porque tienen que atender a un número de pacientes excesivo y eso repercute, primero, en la calidad asistencial, y luego en la salud de los trabajadores y en el sentimiento de no poder llegar a hacer las cosas como hay que hacerlas. Y esto viene ocurriendo de manera continuada. Con la autogestión, que va acompañada de otras medidas que la hacen posible, el profesional, dependiendo del punto donde trabaje y del momento en el que se encuentre, va a poder organizar su agenda de la manera más oportuna que crea conveniente. No es lo mismo estar con epidemia de gripe o en días de verano, en vacaciones. —Póngame un ejemplo. —Un médico dice «voy a organizarme con 35 pacientes», por ejemplo. Entonces, los pacientes que están por encima de ese cupo van a gestionarse con una serie de compromisos que tiene el Sescam con la Atención Primaria y que son diferentes en cada centro de salud. Está la figura del médico referente, que va a garantizar la atención integral del conjunto de pacientes que están asignados al equipo, y un ejemplo sería que esos pacientes los viera el médico del equipo que está saliente de guardia, entre otras funciones. —¿Qué se hará en los puntos de atención continuada, los PAC? —En ellos, los médicos empiezan a las tres de la tarde a trabajar y es otra herramienta para que ningún paciente se quede sin ver porque el objetivo es que los médicos no estén sobrecargados y que la ciudadanía tenga ese servicio y, además, de calidad. Ahora sentimos que no está siendo así. Estos PAC van a ser ampliados en horario y no solo van a estar operativos a partir de las tres de la tarde sino que se ampliará también por la mañana en los centros que sea necesario. Y por supuesto, el límite del número de cartillas, de 1.750 en el caso de los médicos de Atención Primaria, y de 1.250 en pediatría, es una buena medida. —Aplicar este acuerdo es un trabajo complejo y necesitará de una coordinación en toda la región. —Es un trabajo de todos y entre todos. Nosotros, como Sindicato Médico de Castilla-La Mancha, estamos yendo a todos los centros de salud e informando a los médicos de Atención Primaria de que esto es lo que se ha acordado. Indudablemente, toda la cúpula del Sescam deberá informar a los gerentes y estos a su vez a los coordinadores de los centros de salud. —Y de cara a los usuarios. ¿Cuándo podrán ver algún tipo de mejora? —Es que a los usuarios no les va a alterar absolutamente nada, van a seguir acudiendo a los centros de salud de igual forma. —Pero hay muchas demoras en la petición de citas; hay que esperar muchos días para que te atiendan y a veces solo lo hacen por teléfono. —Lo que se pretende con el acuerdo es que esto no ocurra. Que el usuario no se preocupe, que, en todo caso, lo que va a haber es una mejora para ellos. Y esa demora irá disminuyendo progresivamente. —Esos 76 nuevos médicos que anunció el consejero de Sanidad hace unos días, ¿ya están trabajando? —Llevamos trabajando desde junio de 2022, incluso antes, porque ya sabíamos que tenía que haber un aumento de plantilla y efectivamente así está ocurriendo. Y habrá más. A esos profesionales los han ido introduciendo y han empezado en Toledo y en Alcázar de San Juan, y se irán incorporando más donde sean necesarios. —¿Qué opina de las críticas por parte de algunos sindicatos, como CSIF, sobre el acuerdo? Dicen que no sirve para nada y que es electoralista. —A mí me da mucha pena escuchar eso. En primer lugar, yo soy sindicalista y estoy en un sindicato profesional. Yo solamente defiendo a los facultativos y cuando busco negociar con la administración es porque los facultativos de mi comunidad autónoma me están diciendo los problemas que hay. CSIF es un sindicato de funcionarios y tiene muchísimas categorías. Y me da pena que se tomen esto así. No es una cosa que se nos haya ocurrido ahora porque vienen las elecciones. Nosotros llevamos reuniéndonos desde junio, hace nueve meses y el acuerdo se ha firmado en febrero. Y sobre que no sea esta la solución, habrá que verlo. —¿Se verá pronto? —El acuerdo contempla que en dos meses revisaremos y nos sentaremos para seguir hablando. Que se pongan ellos a trabajar y a ver qué es lo que pueden hacer por la Atención Primaria en las demás categorías. No se me ocurrirá hablar mal si ellos llegan a un acuerdo para que los celadores y los administrativos de los centros de salud se beneficien. Pero yo defiendo a los facultativos y cuando me siento a negociar hablo de ellos, que es lo que conozco profundamente y lo que me dedico a defender. Ellos pueden trabajar de la misma manera sin necesidad de tirar por tierra este acuerdo, del que todavía no tienen criterio para decir que no funciona. Se firmó la semana pasada. —¿Han visto a la administración más sensible, ahora que se acercan las elecciones, a la hora del acuerdo? —Creo que todas las administraciones de este país están más sensibles con el tema de sanidad desde hace un par de años. No me gusta sacar lo de la pandemia pero en este caso es inevitable; la pandemia ha sacado a relucir muchas cosas y hay más sensibilidad en general. Yo quiero pensar que la administración no está haciendo esto con fines electoralistas porque llevamos trabajando en esto antes del verano, le repito. Y si hay más sensibilidad ahora es que hay un problema en la Atención Primaria y ellos son los que tienen la oportunidad de poder arreglarlo o mejorarlo, son los que tienen que estar más sensibles. Y la gente que nos ve trabajar a diario cada uno en su sitio, lo sabe. Nosotros trabajamos en todo momento y cuando hace falta, sea la fecha que sea. —En Atención Primaria se trabaja mucho y quizá los médicos que terminan su formación no quieran ir a los centros de salud. —Por eso quiero destacar otro punto del acuerdo que me parece importantísimo. Y es el objetivo de crear más plantillas para que haya suficientes facultativos en Castilla-La Mancha. En el acuerdo viene implícito que a los residentes que acaben se les va a hacer un contrato de tres años. Y me parece muy importante porque la región tiene sus facultades de Medicina, tenemos nuestra propia cantera, y nosotros como Sindicato Médico defendemos mucho el cuidado de nuestros residentes y queremos que se queden y buscarles trabajo en nuestra comunidad autónoma. Hemos puesto mucho tiempo en ellos, energía, dinero, de todo, y además salen muy bien formados y queremos que se queden. Y esto tambien viene en el acuerdo. Tenemos muy claro que tenemos que trabajar mucho con esta gente joven que está saliendo ahora. Ellos son el futuro de Castilla-La Mancha y hay que concienciarlos, protegerlos y conseguir que las condiciones laborales sean apetecibles. Y en ello estamos.