Juana de Arco y su vida arden en Matadero en un ritual de sanación

Juana de Arco y su vida arden en Matadero en un ritual de sanación







Una campesina analfabeta tiene visiones de San Miguel, Santa Margarita y Santa Catalina de Siena. Morirá en la hoguera acusada de herejía, tras un juicio amañado, antes de cumplir los 20 años. Conocida como la doncella de Orleans, la figura de Juana de Arco ha inspirado películas, series, cortos, novelas, cómics y obras de teatro, la última con texto de Sergio Martínez Vila y dirección de Marta Pazos se estrena este jueves en la Nave 10 del Matadero de Madrid.

El estreno absoluto de Juana de Arco abre la temporada teatral de la Sala Max Aub y podrá verse del 3 de octubre hasta el 3 de noviembre. De un eclipse de sol a un eclipse de luna, la obra reescribe con un hondo aliento poético el mito de una adolescente que guio a la victoria a las tropas francesas en la Guerra de los Cien Años. Una vida trepidante que lleva a Juana con apenas 17 años a convencer a Carlos VII para que le deje encabezar su ejército con un estandarte en ristre y vestida con una fulgurante armadura.

Contra todo pronóstico, una adolescente −que afirma hacer la voluntad de Dios− consigue levantar el asedio a la ciudad de Orleans y convertirse en una líder carismática para los soldados y el pueblo. Su estrategia militar ofensiva, lleva a ganar terreno a las tropas leales al delfín de Francia, pero su exitosa campaña termina cuando es capturada en una emboscada por las huestes borgoñonas, aliadas de los ingleses.

Católica ferviente, criatura de luz, los caminos del espíritu se embarran con la gloria terrenal, y en un juicio eclesiástico, sin garantías y cuyo resultado estaba decidido a priori, Juana será condenada por herejía y travestismo, por vestir ropas de hombre. En la versión teatral, que sube a las tablas del Matadero, la historia está protagonizada por un elenco íntegramente femenino: Georgina Amorós, Katalin Arana, Macarena García, Lucía Juárez, Bea de Paz, Ana Polvorosa y Joana Vilapuig (en el papel principal).





El elenco al completo de ‘Juana de Arco’ con su directora.

La directora, Marta Pazos, explica a RTVE.es que el reparto es exclusivamente femenino porque tradicionalmente la historia la han escrito los hombres: «Yo creo que es un buen momento y es responsabilidad también nuestra, contarla con nuestra voz. Es importante que las voces que oigas, los cuerpos que veas, sean de mujer».

La dramaturga define la pieza «casi como un auto sacramental», en el que los personajes son poderes, conceptos. A Juana de Arco «la rodean lo divino, la justicia, lo bélico, la monarquía, lo salvaje. Y a través de una escritura muy poética que se entremezcla con hechos reales, se trenza esta puesta en escena», describe.

Para Pazos, la doncella de Orleans fue «un grito de esperanza», una mujer que «en unos siglos terribles, durante la Guerra de los Cien Años, en un momento de muchísima oscuridad, ella aparece como una luz«. Como creadora, le interesa la historia de «nuestras abuelas» de las mujeres «que nos están inspirando en este momento para construir un mundo mejor» y «escribir sobre las que nos precedieron con respeto y honrar ese legado».

Mujer, poder y palabra

Juana era virgen, lo certificaron en dos ocasiones, pero durante el juicio le intentaron achacar relaciones lésbicas con Catherine La Rochelle, una muestra del control del sistema sobre el cuerpo de la mujer. Para la directora, «eso nos habla de la importancia de poder proteger nuestro cuerpo y elegir qué hacer con nuestro cuerpo, en un mundo que todavía no está así» y cita la falta de derechos de las afganas, las ablaciones en África o la atleta olímpica que fue quemada por su novio.

Pazos apunta que cuando una mujer tiene poder, «la forma más fácil de desacreditarla es la locura o la brujería«. Destaca que la Historia se ha escrito así que «si tú estás liderando, si eres dueña de tu vida, lo que te va a pasar es que te vas a suicidar, te vas a morir sola, en la miseria o te vas a volver loca», un mensaje que también transmite la época contemporánea. En su opinión, es importante desmontar este discurso de que las mujeres no pueden ponerse en los lugares de poder porque «el precio a pagar es muy alto» y analiza que «todo va al mismo lugar, al mismo núcleo, quitarnos el poder, deslegitimarnos y sacarnos de nuestra propia palabra«.

La fuerza de la fe

La actriz que encarna a Juana, Joana Vilapuig, confiesa a RTVE.es que «no quería que fuera una víctima, ni una persona que sufre todo el rato. Ella es una fuerza de la naturaleza que consiguió cosas muy difíciles en aquella época (1428). Era una campesina y logró plantarse delante del rey, pedirle 3.000 hombres para ir a la guerra y se los dieron, a una niña de 17 años. Me parecería fuerte ahora mismo que alguien se plantara ante el rey y le pidiera soldados, pero Juana lo consiguió, con fuerza, creyendo en ella misma y con ímpetu«.

Me dijo: “Ve y levanta el muro que asedia a Orleans. Robert de Baudricourt te proporcionará una escolta para acompañarte”. Ese mismo ángel le aseguró a mi Rey, al traerle la corona, que debería tener todo el reino de Francia por medio de Dios y mi labor, que él debería ayudarme a comenzar el trabajo, dándome hombres y armas o de lo contrario no sería consagrado ni coronado. (Transcripción del juicio a Juana de Arco de 1431)

Vilapuig destaca del montaje, que se articula en torno a «una mirada femenina de mucha fuerza y creo que muy potente«. En referencia a sus compañeras, apunta que «levantamos esta obra y todas vamos a contar esta historia de Juana por que todas podríamos ser ella y esto ha sido algo muy especial». Precisamente, la representación arranca con las siete actrices bailando juntas, el momento favorito de la función para su protagonista.

Un ritual de sanación

La interprete cree que el público conoce el nombre de Juana de Arco pero no saben «quién era realmente, que vivió y que hizo». En su opinión, es importante conocer la historia porque no estamos tan lejos: «Estamos viviendo en un momento donde hay muchísima agresividad masculina hacia las mujeres y hace nada quemaron a una. Los hombres siguen matando, siguen quemando, siguen juzgando y nos siguen poniendo en duda». Por eso, apunta que cada noche intentan hacer «un ritual de sanación«.

Fascinada por la doncella de Orleans, Vilapuig subraya sus logros militares, su liderazgo del ejército y también que las actas del proceso eclesiástico permiten conocer sus palabras: «Podemos escuchar su voz y hay frases de la obra que son tal cual ella las dijo y eso es muy fuerte».

Juana de Arco hizo gala en su juicio de una serenidad y madurez impropias de sus 19 años, los inquisidores no lograron hacerla dudar y ,ante una pregunta trampa sobre si estaba en la gracia de dios, contestó con una sutileza digna de un teólogo: «Si no lo estoy, que Dios me ponga allí; y si lo estoy, que Dios me mantenga así. Sería la criatura más triste del mundo si supiera que no estaba en su gracia». Una respuesta positiva la hubiera condenado por herejía y una negativa le quitaría su convicción de obrar según la voluntad divina.

El fuego místico

Vilapuig desvela que en una escena «Juana vuelve para contar la historia. Es una Juana que ya sabe lo que es, sabe lo que le va a pasar, ya sabe que la van a usar, ella sabe por qué está allí y por qué la historia la necesita», un momento en el que el personaje es encarnado por dos actrices.

La directora invita a vivir «una experiencia contemplativa» a través del elemento del fuego, muy presente en la obra, pero no solo por su poder destructor sino inspirador, como fuego místico o llama divina y resume: «Contemplar el fuego te lleva a la iluminación, te lleva a lo sublime. Lo sublime te conecta con lo espiritual y esta puesta en escena está articulada de esa forma».

Juana de Arco es una producción de Nave 10 Matadero y el primero de los estrenos absolutos para esta temporada. También se representan por primera vez La gramática, comedia sobre una limpiadora en la RAE, La otra bestia, escrita e interpretada por Ana Rujas, Nerium Park, Las amargas lágrimas de Petra von Kant, protagonizada por Ana Torrent y Vendrán los alienígenas y tendrán tus ojos.

Juana de Arco en Matadero

La directora Marta Pazos dirige el estreno de Juana de Arco

Texto: Sergio Martínez Vila

Elenco: Georgina Amorós, Katalin Arana, Macarena García, Lucía Juárez, Bea de Paz, Ana Polvorosa y Joana Vilapuig (como Juana)

Lugar: Nave 10 de Matadero en Madrid

Fechas: Del 3 de octubre al 3 de noviembre

Duración: 101 minutos, sin intermedio

Diseño de espacio escénico: Max Glaenzel

Sonido y música original: Hugo Torres

Coreografía: Belén Martín Lluch

Vestuario: Leandro Cano

Iluminación: Nuno Meira. El espectáculo utiliza aparatos de luz estroboscópica que pueden afectar a personas con epilepsia

Fuente: www.rtve.es